Tras la realización de la actividad motivadora en el colegio, procedemos a analizar las distintas ideas preconcebidas y erróneas. En base a las ideas planteadas recogeremos una serie de preguntas sobre qué queremos saber, para así llevar a cabo el diseño de las estrategias pertinentes para su desarrollo en el aula.
- Las ideas preconcebidas que tenían los niños y niñas fueron las siguientes:
- Identifican las partes del cuerpo generales, tales como, cabeza, tronco, brazos, manos y piernas)
- Conocen partes del cuerpo más específicas como el fémur (diciéndonos que era el hueso más largo del cuerpo) , hígado, cerebro ( diciéndonos que sirve para pensar), corazón …
Realizan sonidos del cuerpo con las manos (dando palmadas), con los pies (dando zapatazos) e incluso con la boca (juntando la lengua en el paladar y provocando ese sonido) y chasquidos con los dedos de las manos.
Por otra parte, las ideas erróneas que tenían los niños y niñas fueron las siguientes:
- Tienen la creencia de que el pensamiento era un sonido.
- La emisión de sonidos solo se hace con la boca o la voz
- Piensan que con el cuerpo lo único que pueden hacer es moverse, saltar o correr.
Tras el análisis de estas ideas preconcebidas y erróneas sobre el cuerpo humano y sus posibilidades sonoras, llevamos a cabo la propuesta de las preguntas que queremos saber:
- ¿Podemos hacer sonidos con nuestro cuerpo?
- ¿Con qué partes del cuerpo podemos producir sonidos?
- A parte de los pies, manos y boca ¿existen otras posibilidades sonoras?
- ¿Tenemos sonidos dentro de nuestro cuerpo?
- ¿De dónde vienen esos sonidos?
- ¿Qué diferencias ves entre los distintos sonidos del cuerpo?
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