Diario 17 de Diciembre: ¡Creamos nuestro cuento!

En esta clase decidimos ponernos manos a la obra con la realización del cuento, ya que anteriormente no habíamos estado muy inspiradas pero parece que ese día nos habíamos levantado cargadas de ideas.
Al principio, el cuento nos preocupaba un poco ya que no teníamos muy claro como encajar todos los sonidos recogidos de los niños y niñas, pero cuando empezamos a escribirlo las ideas se iban enlazando solas.
Además, decidimos utilizar como recurso la repetición ya que captaríamos de esta forma con más facilidad la atención de los niños y conseguiríamos que no perdiesen el hilo conductor de la historia.

Cuento "Escúchate"

Hace mucho tiempo, en un colegio de Sevilla, había un niño llamado Roberto.

Roberto era un niño muy feliz pero llevaba unos cuantos meses algo preocupado. Todos sus compañeros de clase, habían aprendido las partes del cuerpo y los sonidos que podían producir cada una de ellas, pero él siempre se confundía, provocando que la clase se burlase y riese de él.
Una noche, Roberto, mientras dormía, escuchó un ruido extraño en su habitación pero muerto de miedo decidió seguir durmiendo. Hasta que de repente, sintió que algo se había puesto encima de su cabeza.
Asustado, abrió lentamente los ojos y ¿sabéis lo que se encontró? Un pequeño duendecillo cuyo nombre era Tintón.
Tintón, que era experto en conocer las partes del cuerpo y los sonidos que producen el cuerpo de los humanos, había visto la preocupación de Roberto y había decidido venir a este mundo para ayudarle.
Roberto decidió comprobar si lo que decía el duende Tintón era cierto, y le preguntó qué sobre qué parte del cuerpo se encontraba él.
Tintón respondió: - Es la cabeza, pero yo prefiero enseñarte las partes del cuerpo de una forma más divertida.

Tintón le propuso a Roberto jugar a un juego con ayuda de su cofre mágico de sonidos.
Roberto entusiasmado aceptó jugar con él.
Tintón: -Roberto me acercaré a una parte de tu cuerpo y tú deberás decirme de qué parte se trata. Y además, para hacerlo un poco más difícil, deberás decirme un sonido que puedes realizar con esa parte del cuerpo.
Roberto dijo:-¡Qué divertido! ¡Empecemos!

Tintón: ¡Si! Vamos a empezar…¿qué parte del cuerpo es está? (mientras Tintón se subía a la cabeza de Roberto)
Roberto dijo muy contento: ¡esta es la cabeza!
Tintón: Vamos a comprobarlo con el cofre mágico.
Y de repente, apareció el cofre mágico de los sonidos y se abrió diciendo: -¡La cabeza!
Tintón: Muy bien Roberto has acertado. Sigamos.
¿Y qué parte del cuerpo es esta? - decía Tintón mientras se colocaba en la nariz de Roberto.
Roberto no sabía responder así que de repente se abrió la caja mágica y dijo: -¡La nariz!
Tintón le preguntó a Roberto si sabía decirle algún sonido que produjese la nariz pero Roberto no sabía contestar.
Por lo que la caja mágica se abrió y se escuchó el sonido de la respiración.
Tintón: Vale Roberto ¿y que parte del cuerpo es esta?
Tintón se acercó a la boca de Roberto.
Roberto:  La “boque”.
Tintón: ¿Boque? mmmm… vamos a ver que responde el cofre mágico.
El cofre se abrió y dijo: -¡La boca!
Tintón le volvió a preguntar si sabía algún sonido que pudiese hacer con esa parte del cuerpo. Roberto le respondió que un sonido podría ser un beso pero no sabía cómo representarlo.
El cofre mágico se volvió a abrir y sonaron muchos besos.  El cofre se volvió a cerrar y a abrir de nuevo y se escucharon muchas risas.
Tintón: ¿Ves Roberto? Aparte de los besos, con la boca podemos reírnos. ¿Habrá sonido más bonito que este?
Tintón se bajó a las manos de Roberto y le preguntó que de qué parte se trataba.
 Roberto se quedó callado, no sabía qué decir. De repente, el cofre mágico se volvió a abrir y se escuchó:-¡Las manos! y a continuación se escucharon palmas.
Tintón: Vés Roberto, con nuestras manos podemos hacer palmas. ¿A ti te gusta ir a la Feria? En la Feria siempre se tocan las palmas.

El duende Tintón dió una vuelta alrededor de Roberto y se paró en su trasero.
Uy, ¿que tenemos aquí? ¿sabes de qué parte del cuerpo se trata?
Roberto le dijo que no se acordaba como se llamaba.
El cofre mágico se volvió a abrir y dijo: ¡El culo! y se escuchó el siguiente sonido: ¡prr!

Tintón: - Venga Roberto, esta es la última parte del cuerpo que voy a preguntarte. ¿Sabes cual es?
Mientras decía esto, Tintón se fue a los pies de Roberto.
Roberto:- Esta si la sé, ¡son las piernas!
Tintón: Mmmm… bueno, a ver qué nos dice el cofre mágico.
El cofre mágico se volvió a abrir y se escuchó: ¡Los pies! y seguidamente, se escucharon zapatazos.

Tintón: Bueno Roberto, ¿has aprendido ya las partes del cuerpo?
Roberto: ¡Sí! Ya sé que tenemos un culo, una cabeza, en la que hay una nariz y una boca… También tenemos manos y pies… Y ya no confundo ninguna de ellas. Muchas gracias Tintón, ahora en clase podré enseñarle a los compañeros los sonidos que podemos hacer.

Roberto muy contento se volvió a dormir. A la mañana siguiente, Roberto despertó sin ver a Tintón por ninguna parte y no sabía si lo que había vivido esa noche había sido real o todo un sueño. Lo que sí tenía claro, es que había aprendido todas las partes del cuerpo y los sonidos que se podían haber con ellas.
¡Y colorín colorado, con un pie y una mano, este cuento se ha acabado!